Lo confundió el Billiken
Esta historia me llegó por medio de un primo, camionero el y por lo tanto contador de mil historias y anécdotas, algunas quizás hasta ciertas.
Dice que en una ocasión en un viaje a Buenos Aires, debido a no se que problema, se encontraron varados en Liniers, y al disponer de unas cuantas horas de ocio, invitó a un colega (también de Parera y conocido por no tener "todos los caramelos en el frasco") a conocer el centro de la capital ya que el mismo no había ido nunca. Dieron vueltas por un buen rato, lo llevó a conocer Palermo, fueron hasta la cancha de Boca, la calle Florida y por último lo llevó a ver el Cabildo, La Casa de Gobierno, La Plaza de Mayo, El Congreso, etc. El amigo quedó ''chocho''con el viaje y volviendo en colectivo para Liniers mi primo le preguntó: -¿Y?, ¿te gustó la capital?, ¿qué te gustó mas? Y el, tal vez influido por las figuritas de los ''Billiken'' de su infancia le contestó: -Me gustó el centro histórico, pero para mi, nos faltó ver la casa de Tucumán.
Adrián.
Dice que en una ocasión en un viaje a Buenos Aires, debido a no se que problema, se encontraron varados en Liniers, y al disponer de unas cuantas horas de ocio, invitó a un colega (también de Parera y conocido por no tener "todos los caramelos en el frasco") a conocer el centro de la capital ya que el mismo no había ido nunca. Dieron vueltas por un buen rato, lo llevó a conocer Palermo, fueron hasta la cancha de Boca, la calle Florida y por último lo llevó a ver el Cabildo, La Casa de Gobierno, La Plaza de Mayo, El Congreso, etc. El amigo quedó ''chocho''con el viaje y volviendo en colectivo para Liniers mi primo le preguntó: -¿Y?, ¿te gustó la capital?, ¿qué te gustó mas? Y el, tal vez influido por las figuritas de los ''Billiken'' de su infancia le contestó: -Me gustó el centro histórico, pero para mi, nos faltó ver la casa de Tucumán.
Adrián.
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